lunes, 4 de noviembre de 2013

Inunda el Condominio Acero la 2a Comisión General por Pensión Universal

Enrique Peña Nieto prometió formalmente "una pensión del retiro para toda la población en México" el 6 de mayo de 2012, durante el debate entre los candidatos a la Presidencia de la República.
Ya como Presidente, redujo la cobertura a las personas de 65 años y mayores, pero hubo todavía otra restricción: las pensionadas y pensionados no quedaron incluidos, lo que no obsta para que Peña Nieto la llame "Pensión Universal".
El apoyo económico que esta "pensión" aporta es una miseria: 1,050 pesos bimestrales, con posibilidades de incremento en un plazo muy largo, considerando la avanzada edad de los beneficiarios. Sin embargo, aún así representaría un aumento significativo a las pensiones de hambre del IMSS: alrededor del 25 por ciento de incremento.
En la presentación del 27 de agosto, el Delegado de Sedesol Federal, Pablo Elizondo García, refirió que prácticamente era imposible una modificación a la iniciativa del Presidente: habría que pasar por la Cámara de Diputados, luego la de Senadores, etc. Recogió un merecido repudio ante lo que todo México sabe son decisiones políticas del Ejecutivo. Tan es así, que a los pocos días se dio a conocer que en Nuevo León, sí habría una excepción, al incluir a las y los pensionados de la Sección 50 del SNTE dentro de dicho programa, aún cuando sus pensiones son muy superiores a las del promedio de las pensiones del IMSS.
Este fue el cuestionamiento principal para Pablo Elizondo el pasado 29 de octubre, en la segunda Comisión General que congregó a alrededor de 450 personas quienes invadieron la planta baja del Condominio Acero donde se encuentran las oficinas de Sedesol Federal, decididas a continuar con la campaña por una Pensión Universal que incluya a las y los pensionados, hasta ahora injustamente discriminados por Peña Nieto.
La movilización de las y los pensionados parte de este convencimiento, de que se les debe devolver una pequeña parte de la riqueza que produjeron con su trabajo, y que es intolerable seguir tolerando esas pensiones miserables que no les permiten vivir sus últimos años en condiciones dignas.
La prensa en general cumplió con su papel: ignoró esta movilización de la clase obrera en el retiro. Ellos, igual que el Gobierno, piensan que la respuesta del silencio acabará por llevar a la muerte natural a esta protesta. Los involucrados por lo pronto están conociendo la mezquindad y demagogia del régimen priista y están convenidos de que vale la pena no solo sostener, sino ampliar esta lucha.
Si usted quiere conocer más sobre este movimiento y le interesa apoyar esta lucha, diríjase a la AC "Tierra y Libertad", en Almazán 2675, Col. Tierra y Libertad en Monterrey N. L. Tel 8183 7399 65, correo e: radiotyl.lamera@yahoo.com