Hace 20 años, el Partido del Trabajo de Bélgica (PTB) tuvo
el coraje suficiente para enfrentar la ola reaccionaria que a nivel
internacional desencadenó la caída de la Unión Soviética y el bloque de países
de Europa Oriental.
Mientras la rapiña imperialista en colusión con las fuerzas
procapitalistas de esos países se repartían el botín que representaban los bienes
colectivos laboriosamente acumulados durante el proceso de construcción del
socialismo y desmantelaban sus instituciones colectivas, los grandes medios de
comunicación lanzaban con sus dramáticos
reportajes las últimas paletadas de tierra sobre el cadáver del socialismo. Las potencias fomentaban las discordias
étnicas y la fragmentación de las que fueron repúblicas socialistas, lo mismo Yugoeslavia
que la expoderosa Unión Soviética, como la pequeña Albania; Cuba era abandonada a su
suerte en medio de una terrible crisis económica y la imagen de China socialista sometida a toda
suerte de tergiversaciones.
En ese ambiente de confusión, desaliento y dispersión,
cuando muchos que se declaraban marxistas o simpatizantes del comunismo se
deshacían de sus carnets del Partido y de sus manuales y folletos de autores
marxistas, el PTB tomó la iniciativa de convocar al Primer Seminario Comunista
Internacional, que se ha reunido desde entonces cada año en Bruselas, con una
participación cada vez más numerosa y más amplia, asistiendo representantes de
organizaciones procedentes de Africa, Amèrica Latina, América del Norte, Asia y
Europa.
El Seminario propuso la colaboración de estas organizaciones
para analizar a fondo las causas que condujeron a la restauración capitalista y
sacar así lecciones para el futuro, labor que se realizó principalmente entre
1992 y 1996; igualmente, se analizaron cuestiones fundamentales para el
desarrollo de la lucha anti-imperialista y por el triunfo del socialismo a
escala mundial en el Siglo XXI. En el curso de estos 20 años, muchas de las
predicciones del Seminario sobre la continuación de las guerras depredadoras
por las potencias imperialistas y la agudización de las crisis capitalistas se
han venido cumpliendo, demostrando el rigor y justeza de sus análisis realizados
con la metodología marxista.
La realización del Seminario ha sido un gran esfuerzo y una
aportación fundamental del PTB al movimiento comunista internacional. Surgiendo como un partido pequeño en uno de
los países más pequeños de Europa, el PTB se ha consolidado a partir del núcleo
surgido de las luchas estudiantiles de los años 60s, educado en la lucha contra
el revisionismo, integrado a las luchas de masas, aplicando en forma
consecuente los principios del marxismo leninismo.
En estos últimos días, el PTB, que interviene en los
procesos electorales de su país, ha logrado importantes triunfos, que con
diferentes grados de sorpresa y disgusto, los representantes del capital hacen
constar alarmados como “el avance de la extrema izquierda”. El PTB no es un partido electorero, pero sabe utilizar estos espacios legales. Los votos en su favor expresan la creciente confianza del pueblo belga en una linea política clasista bien definida y en un correcto estilo de trabajo.
El PTB que ostenta como
lema: “Primero la gente, no las ganancias”, ha señalado las causas de su éxito,
que no se reducen al supuesto “voto de castigo” por la crisis que en este país también se ha dejado sentir, como
en toda Europa, aunque no con la misma intensidad. Entre estas causas están: la lucha por salud, educación y vivienda,
directamente con los más necesitados de esos servicios; el trabajo con los jóvenes,
el apoyo a los adultos mayores, el apoyo a los trabajadores inmigrantes, la
labor en los sindicatos y la lucha por la unidad de las dos grandes regiones
(neerlandesa y francófona), que los partidos de derecha se empañan en dividir.
Bélgica es un país muy pequeño (apenas la mitad territorial
del estado de Nuevo León), pero su importancia geopolítica y económica es muy
grande, como sede de la Unión Europea y de las fuerzas de la OTAN. En ese
enclave del imperialismo está dando su lucha ejemplar el Partido del Trabajo de
Bélgica, del cual, no cabe duda, hay mucho que aprender cuando aún está fresco
el recuerdo de su fundador, dirigente y
gran defensor de los principios del marxismo leninismo, Ludo Martens, recientemente desaparecido.
Por si fuera necesario, hay que decirlo: este es un auténtico Partido del Trabajo, que nada tiene que ver con esa caricatura de Partido "del Trabajo" que conocemos en México.
si q los dejo traumados Anaya! Es su leit motiv
ResponderEliminarAnónimo había dejado varios posts sin replicar a nombre de su patrón. No está nada bien eso de cobrar sin trabajar. Ni que fueras Senador...
ResponderEliminarQ cosa fuera su vida sin Anaya: no tendría sentido. No aprendieron otra cosa
ResponderEliminarlic camero e stainess solo saben recitar el manifiesto comunista y el libro rojo de mao. marx se reiría de lo que hacen en su nombre.
ResponderEliminarlas personas d la tercera edad tmn pueden aprender, estan a tiempo. aprendan algo y no solo actos circenses de a peso
¡Pura artillería pesada esta sesuda argumentación en favor del PT y su gran dirigente fundador del marxismo-salinismo, Alberto Anaya! Para que vean que no nomás el PRI y el PAN tienen comelonches a su servicio.
ResponderEliminarDe plano no pueden vivir sin hablar de Beto. que tiene q ver q vivan en medio lumpen y traumas personales con el marxismo? q han hecho por la eliminacion de la explotacion por el capital sentados comodamente en la colonia?
ResponderEliminarY los Obreros? cuantos sindicatos sienten su presencia o consejos o sus sesos?
Camarada Deng Xiaoping